Elaborado a partir de la destilación de vinos blancos jóvenes y afrutados, sanos y limpios, con cuerpo y baja acidez,
para la obtención de las mejores holandas y destilados. Sometido posteriormente a un prolongado envejecimiento por el tradicional sistema de Criaderas y Solera.
Crianza:
Mediante el sistema tradicional de Criaderas y Solera durante no menos de 7 años en botas de roble americano, procedentes de nuestras soleras fundacionales.
Notas de cata:
Color ambarino con reflejos dorados, de profundos aromas propios de los brandies finos. Delicado paladar a nueces y roble, suave, muy equilibrado en boca,
largo y ligeramente amargo al final.
Obtenido a partir de la destilación de vinos blancos y afrutados con cuerpo y baja acidez, para la obtención de las mejores holandas y destilados. Posteriormente se envejece durante no menos de 15 meses en botas de roble americano, que previamente han contenido vinos finos de Montilla.
Crianza:
Envejecido por el tradicional sistema de Criaderas y Solera en botas de roble americano envinadas durante años con vinos finos de máxima calidad.
Notas de cata:
De color yodado oscuro con reflejos caoba. En nariz posee aromas complejos y profundos con notas de roble y frutos secos. En boca es intenso, amplio, muy persistente al paladar con matices de roble viejo.
Elaborado a partir de la destilación de vinos blancos jóvenes y afrutados, sanos y limpios,
con cuerpo y baja acidez, para obtención de las mejores holandas y destilados.
Notas de cata:
Color ambar con reflejos dorados. De aromas propios de los brandies finos envejecidos en madera durante un largo
periodo de tiempo. Delicado al paladar con reminiscencia a frutos secos como la nuez.Muy equilibrado en boca.